
Bogotá, 7 de junio de 2019 (CD) – En diálogo con la W el expresidente y senador, Álvaro Uribe, habló sobre la sentencia de la Corte Constitucional que permite el consumo de alcohol y drogas en la calle.
A continuación la transcripción de la entrevista:
Periodista. El senador Álvaro Uribe Vélez sobre ese tema escribió: «La persona enajenada por el licor y las drogas, pierde el autocontrol y su voluntad decisoria, calidades que el ser humano lo hacen libre y diferente de otros seres vivos de la naturaleza. Nos llaman a la calle y a buscar reformas de fondo».
Senador y ex presidente de la República, Álvaro Uribe Vélez, muy buenos días.
AUV. Julio, muy buenos días a usted, al equipo periodístico de la W y a los oyentes.
Periodista. Senador, cuando usted dice «nos llaman a la calle y a buscar reformas» de fondo, sobre lo que ha pasado en esta nueva confusión que se presenta para una autoridad o para un consumidor, qué pues, antes tenía la dirección de un código de policía y ahora un mandato constitucional dice otra cosa; al decir usted, «nos llaman a la calle», usted lo que está diciendo es que, ante este nuevo choque de interpretaciones, lo conveniente o lo conducente es ir a la calle y eso quiere decir ¿la constituyente?
AUV. No. No necesariamente, pero, ir a la calle y buscar decisiones contundentes que pueden darse en el Congreso de la República, ahora, déjame hacer estos comentarios Julio con todo el respeto. Primero: Este es un juicio de valor de la Corte, no un juicio constitucional. En ninguna parte dice la Constitución colombiana, que, para respetar el libre desarrollo de la personalidad hay que permitir el consumo de drogas y alcohol en lugares públicos. Yo no sé de dónde hacen esa inferencia esa es una apreciación subjetiva, que no debería provenir de un magistrado de la Corte Constitucional, expresada en una decisión constitucional. Me parece muy grave.
Y, segundo, si vamos a lo valorativo, pues, entonces, muchos tenemos en Colombia la idea opuesta. La libertad de consumir drogas y alcohol en lugares públicos, la imposibilidad de que el Estado lo restrinja, eso no conduce al libre desarrollo de la personalidad, sino, a la esclavitud el ser humano, porque como lo escribía yo en ese Twitter que usted amablemente leyó, estos consumos lo que hacen es conducir al ser humano a la alienación, a la enajenación y, el ser humano enajenado pierde su autocontrol, pierde su voluntad, su capacidad de discernimiento, que es lo que lo hace libre y lo distinguen de los otros seres vivos de la naturaleza. Entonces, acá hay un tema constitucional, acá hay un tema de apreciación subjetiva y también aquí hay un tema muy grave en la realidad colombiana.
Cuando nosotros estudiamos qué pasaba con el sicariato, encontraba la Policía colombiana, que, el 100% de los sicarios capturados después de cometer un asesinato, habían procedido bajo el efecto de las drogas o bajo el efecto del alcohol o bajo el efecto del consumo combinado de drogas y alcohol y, sigamos, el gran problema de la criminalidad colombiana, hoy en nuestras ciudades, es el tema del microtráfico. Yo oía anoche en San Andrés, donde tenemos un foro del Centro Democratico y en la conversación con la ciudadanía, con las autoridades de San Andrés, encuentra uno que el gran problema aquí gira alrededor del microtráfico, que, además, ahuyenta al turismo.
Periodista. Senador, yo le entiendo perfectamente sus preocupaciones por el microtráfico y le entiendo sobre las interpretaciones sobre este pronunciamiento de la Corte, pero, lo que no entiendo es cuando usted dice «nos llaman a la calle», usted me puede explicar qué quiere decir eso, ir a la calle a qué, en qué circunstancias, en qué condiciones.
AUV. A protestar Julio y a buscar unas medidas contundentes que contrarrestan esto; porque mire, ¿Cómo se va a convertir al microtráfico, después de esta sentencia? Algo importante que ha hecho el gobierno Duque, es el decreto de decomiso, mire, ese decreto no lo ubicaron ni en el prohibisionismo, ni en la liberalización de las drogas, ese decreto es muy inteligente, porque ese decreto simplemente ordena el decomiso, el presidente Duque no está diciendo: «en Colombia se legalizan las drogas y tampoco está diciendo vamos a meter a la cárcel al consumidor», simplemente dice, acá hay un problema muy grave para las familias, para la juventud, para la sociedad, que es el microtráfico y vamos a decomisar la droga que está en la calle; lo advirtió la magistrada ayer, hoy ese decreto queda en el aire, porque entonces se va a quedar sin respaldo legal. Si bien la Corte Constitucional, no podía referir, no podía (…) el tema que estaba en estudio Sui iuris no era el decreto, ya puso las bases para que el Consejo de Estado tenga que anular el decreto, muy grave Julio.
Periodista. Senador Uribe, esta decisión de la Corte en su opinión, es una decisión que se toma con un fundamento meramente legal, como bien se ha dicho por este asunto del respeto al libre desarrollo de la personalidad o ¿lee usted aquí, un trasfondo político en la decisión del alto tribunal?
AUV. En mi concepto, es un juicio de valor, por supuesto, es muy difícil separar el juicio de valor y el juicio político. Entonces, digamos es un juicio de valor político, no es un tema de riguroso constitucional, ¿por qué? Porque la norma constitucional del libre desarrollo de la personalidad, permite, yo no veo la vinculación entre esa norma y estas decisiones de impedir que se prohíba el consumo de drogas y alcohol en lugares públicos. Yo me pregunto ¿dónde está el texto constitucional del cual se puede hacer esa inferencia? Entonces, por eso he dicho esto, además, de ser altamente dañino para la sociedad, para la juventud, para las familias colombianas, de ir en el camino equivocado, porque esto no conduce a la libertad del ser humano, sino, que conduce a la esclavitud a causa de la enajenación, que los lleva las drogas y el alcohol.
Hombre, eso no es juicio de valor, es un juicio de constitucionalidad y es muy grave, sobre todo en estos temas tan sensibles para las familias, una Corte precediendo por juicios de valor que son juicios políticos y no juicio de rigurosa constitucionalidad.
Periodista. Señor expresidente Uribe, durante sus ocho años de gobierno y durante sus años de senador: qué hizo en su gobierno o qué ha hecho su partido para prevenir el consumo, para educar a los jóvenes o la propuesta de su gobierno y de su partido se reduce únicamente y exclusivamente a la represión y a la prohibición.
AUV. No, nosotros hicimos un gran esfuerzo pedagógico con la seguridad democrática todo esos años; no vea usted si no, los resultados de la lucha de nuestro gobierno contra el narcotráfico en la sustitución de cultivos, por ejemplo, algo muy importante que hicimos nosotros con la sociedad colombiana y que está hoy en el olvido, es la siguiente: nosotros tuvimos 120000 familias colombianas que habían estado en la producción de coca, hicimos una gran pedagogía con ellos, con una supervisión de Naciones Unidas, las vinculamos al programa guardabosques y eso funcionó muy bien y, está también el acto legislativo del año 2009 después de luchar todos esos años de gobierno, se expidió el acto legislativo de 2009, que, no criminaliza, pero, sí permite este tipo de medidas de prohibir y decomisar la droga; yo creo que fue un acto legislativo bien importante que yo creo que hoy el gobierno lo pudiera invocar para buscarle, para defender el decreto de decomiso, entonces, si me da la oportunidad, Yamid, si es la voz que reconozco, de recordarle al país que, después de una gran lucha el gobierno nuestro logro que se aprobara el acto legislativo de 2009, que no criminaliza, pero, sí prohíbe y legaliza el tema del consumo de droga; el tema no es llevar a la cárcel, pero sí, eso es ilegal, entonces, lo puede decomisar.
Yo creo que es bien importante y la discusión de ese acto legislativo que se expidió muy bien, entre lo que es la necesidad de criminalizar al narcotráfico y la necesidad de tener políticas educativas, preventivas frente al consumo y también de poder llegar a medidas como la del decreto del presidente Duque de decomisar la droga que circula en la calle.
AUV: Yo creo que eso es bien importante, en la discusión de ese acto legislativo se distinguió muy bien entre lo que es la necesidad de criminalizar un narcotráfico y la necesidad de tener políticas educativas-preventivas frente al consumo y también de poder llegar a medidas como la del decreto del presidente Duque de decomisar la droga que circula en la calle.
La W: Senador Uribe estaba mirando un informe de la OEA que plantea el consumo de drogas sobre una perspectiva de salud pública y dicen que el consumidor no es considerado como un infractor de la ley y que el problema de las drogas se debe plantear en que la despenalización del consumo de drogas debe ser considerada como una base de cualquier estrategia de salud pública, que se debe ver desde esa perspectiva y no desde el prohibicionismo. ¿Usted qué cree de esto?
AUV: No, yo no soy partidario de criminalizar y nunca lo hemos dicho y el acto legislativo del 2009 al cual acabo de referirme siempre fue del gobierno nuestro, siempre fue muy claro en esa materia, pero el otro tema es la posibilidad de evitar que esa droga llegue, entonces además de lo que usted tiene que hacer en materia de prevención, en materia de rehabilitación, yo creo que también es muy importante evitar que esa droga llegue a los consumidores, por eso la importancia del decreto del gobierno Duque. Que mire ese decreto no se enmarca ni en la tesis del prohibicionismo que criminaliza el consumo, ni en la tesis de la legalización que es bastante comprometida también. Ese decreto lo que dice es que lo que vamos a hacer es a evitar que esa droga circule en la calle y uno no puede ignorar estos temas.
Yo veía ya anoche unas reacciones de padres de familia, yo recuerdo que alguna vez como Presidente, llegue al parque de Bosa de Bogotá y me dijeron: “Aquí no pudieron volver a salir los niños porque entonces inmediatamente los reclutan para distribuir droga y terminan de consumidores”. Usted sabe que hay ciudades colombianas donde la edad de inicio del consumo era a los 14 años y hoy es a los 10 u 11 años, también hay cifras que indican que el país tiene 1.700.000 consumidores y yo le ruego tener en cuenta aquello a lo cual me refería. El ciento por ciento en un informe de policía de hace algunos años que los sicarios detenidos después de cometer un crimen, todos aparecían, ciento por ciento de esos sicarios aparecían que habían cometido el crimen bajo el influjo de las drogas y el licor.
Ósea que sí, yo le acepto, yo no estoy de acuerdo con criminalizar el consumo pero si creo que lo que ha dicho la Corte Constitucional le hace mucho daño a Colombia, se necesita una reacción contundente, ese es un juicio de valor político de la C Constitucional, esa no es una decisión rigurosamente constitucional, esa prohibición para que el Gobierno impida en los lugares públicos el uso de drogas y alcohol no conduce al libre desarrollo de la personalidad sino a la enajenación de las personas por esos consumos que priva a las personas de su discernimiento, la persona enajenada pierde el control de su voluntad, que es justamente lo que hace al ser humano libre y lo diferencia de los otros seres vivos de la naturaleza, entonces no criminalicemos pero si hay que combatir la droga en las calles, por eso es gravísima gravísima la decisión de la C Constitucional y el país necesita una reacción contundente.
La W: sí, senador Uribe paso con las objeciones a la JEP y también ahora con esto en la que usted y su Partido y hasta el presidente Duque cuestionan las decisiones de la C Constitucional. ¿No le parece que se esta enviando un mal mensaje al decir que las decisiones judiciales solo las acatamos cuando nos gustan y si no como usted dice, son muy graves y lo que interpreta la gente, por lo menos los seguidores del Centro Democrático es que hay que irse en contra de la Corte?
AUV: No, yo creo que hay que irse en contra de esas decisiones porque aquí hay unos derechos de la sociedad colombiana, unos problemas de la sociedad colombiana, mire por ejemplo por temor a ese microtráfico y a ese narcotráfico empieza a reducirse el número de turistas que estaban llegando año tras año a San Andrés, son temas muy graves que no se pueden desconocer.
Las objeciones, si vamos a las objeciones el Presidente ejerció el derecho que tiene como Presidente de la República de objetar por razones de inconveniencia, mire la gravedad, yo ayer proponía, ayer me preguntaron, creo que estaba este joven que cubre al congreso en nombre de la W, el que esta en remplazo del doctor Lucas Pombo, hizo parte del grupo que me preguntaba ayer en el congreso, me decían bueno y entonces ahora el presidente va a sancionar la ley estatutaria después de que la corte negó las objeciones, el Presidente es un hombre respetuoso del Estado de Derecho, el ejerció una facultad, una competencia del Estado de Derecho que fue objetar la Ley Estatutaria por razones de inconveniencia, y ahora cumplirá el deber del Estado de Derecho de sancionar esa ley a pesar de que tenga puntos con los cuales esté en desacuerdo, pero yo agregué: el hecho de que el presidente sancione, no nos priva a nosotros de seguir con reflexiones. Por ejemplo, algunos dicen de una reforma a la JEP. Yo creo que hay que hacerla y también hay que pensar en suprimir la JEP. A mi me parece muy grave que el país de aquí a 15 o 20 años siga en esa interinidad. Por ejemplo, al haber negado una de las objeciones, la consecuencia es que vamos a dejar de 15 a 20 años a la Fiscalía sin poder adelantar diligencia sobre delitos que tengan que ver hasta el 1ro de diciembre de 2016.
Pero es que se está ignorando otra cosa: la adopción de todo ese ordenamiento jurídico fue una adopción ilegitima, porque, los que perdieron el plebiscito, no hicieron reformas de fondo y en lugar de respetar el plebiscito, pretendieron sanear el tema de la pérdida del plebiscito con una proposición en el Congreso.
Para la democracia es muy grave, que una decisión plebiscitaria la remplace una decisión de un Congreso controlado por el gobierno que perdió el plebiscito. Eso le da un piso de ilegitimidad a ese ordenamiento jurídico y yo creo que eso le da todo el permiso, para que quienes pensamos que hay muchos puntos inconvenientes, sigamos insistiendo en eso. La verdad es que yo como padre de familia, como abuelo, como persona que vivo hablando con muchos compatriotas, creo que la decisión de la Corte Constitucional, ayer, es gravísima para las familias colombianas.
Julio: Pero fíjese Senador, que vuelvo a mi primera pregunta. La calle, la protesta. A usted le parece que el Presidente es respetuoso y entendió perfectamente que tiene que sancionar la ley estatutaria de JEP; pero usted mientras tanto habla de que hay que buscar un mecanismo para acabar con la JEP, que es pues, ni más ni menos, la columna vertebral para llevar justicia en el Acuerdo de Paz; pero todo eso, la única manera de cambiarlo es con una cosntituyente; y yo siento que cuando usted invita a la calle. Pues a la calle no se invita solo a protestar, porque la protesta sin un propósito no llega a ninguna parte ¿Las protesta que usted convoca es para ambientar una cosntituyente?
AUV: Julio, la cosntituyente la crearon en la Constitución del 91, pero le pusieron tantos formalismos que la hacen difícilmente aplicable.
Julio, la constituyente la crearon en la Constitución del 91, pero le pusieron tantos formalismos que la hacen difícilmente aplicable. La ley, el control de constitucionalidad, el umbral que se necesita en la votación después de la elección, el tiempo de vigencia mientras se expiden nuevas normas etc… son temas para discutir. Dividamos estos otros temas en dos. Yo percibiría por lo que vi hoy en el Congreso, que en el Congreso puede haber una mayoría para modificar, para aclarar la norma constitucional y poder poner todo el piso constitucional a las normas que por lo menos restrinjan los lugares para el usos del licor y de las drogas, yo creo que bastaría complementar el acto legislativo nuestro del 2009, que además en el gobierno Santos no tuvo reglamentación, no tuvo desarrollo yo creo que aquí hay en el gobierno otra posibilidad.
Pero por lo que yo converso con congresistas de muchas bancadas, colegas nuestros del Senado y creo que habría mayoría para darle una respuesta favorable a la preocupación de la mayoría de las familias colombianas.
En cuanto a la JEP, yo creo que ahí no hay mayoría para derogarla, tampoco para hacer cambios de fondo, podría haberla para cambios no muy de fondo, entonces por eso digo yo, si bien hay que intentar cambios en el Congreso, yo soy pesimista que no se puede perder de vista la necesidad de una reflexión para suprimir la JEP y trasladar esa competencia a una sala especializada en la Corte Suprema de Justicia, más equilibrada que le de todas las garantías a los militares.