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Palabras del Presidente Álvaro Uribe durante ceremonia de ascensos de la Armada Nacional

Cartagena, 2 jun (SP). “Acudimos a este campo de la Escuela Almirante Padilla a recibir a una nueva promoción de subtenientes y de tenientes, en la Infantería y en la Fuerza Naval. Una generación que ha optado por el camino de la disciplina, de la consagración a la patria, del buen juicio, del estudio.

Los colombianos nos sentimos muy orgullosos de tener jóvenes como el grupo que se gradúa esta noche. Y profundamente reconocidos con sus papás y con sus mamás, que han entregado lo más bello de su vida: el amor del hijo al servicio de la patria.

Colombia trabaja denodadamente por restablecer la seguridad en todo el territorio. Entendida la seguridad como el único camino certero a la paz, como finalmente la causa que genera prosperidad para que el país pueda superar la pobreza y construir equidad. Falta bastante, pero hemos avanzado mucho.

Quiero esta noche hacer un reconocimiento a la Armada. Sus progresos son múltiples. Recuerdo que, hace algunos años, para venir de Sincelejo a Cartagena, y solo para citar un ejemplo de los muchos casos que vivía el país, la carretera estaba obstruida por el terrorismo. Los ciudadanos habían perdido el derecho a la movilidad, y solamente podían hacerlo aquellos que tuvieran la posibilidad económica de pagar un tiquete aéreo.

Pues bien, empezó la Seguridad Democrática, el avance de la Armada, la expresión de su voluntad, toda su aplicación a la Infantería. Y cómo se han recuperado estos tramos viales.

Debemos destacar sus éxitos en el combate al narcotráfico, recientes decomisos en el Pacífico y en Caribe. Aquí esta prácticamente derrotada la guerrilla en esta sección del país, desmantelado el paramilitarismo, pero seguimos sufriendo los embates de las bandas criminales del narcotráfico.

Reitero hoy toda la confianza en la actividad de la Armada para derrotarlas. Los sucesos de esta semana, como los decomisos de cocaína, los decomisos de los sumergibles, nos indican que la Armada va por un buen camino. El camino que el país reclama, el camino que aplaudimos.

Nuestra Armada ha avanzado mucho en la parte de incorporación de tecnología, de investigación, de tecnología aplicada. Los logros de Cotecmar (Corporación de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo de la Industria Naval, Marítima y Fluvial), son sobresalientes.

Lo que ha hecho Cotecmar en construcción de naves para nuestros ríos, aun para nuestros mares, se ha convertido en una proeza. Eso ha implicado un gran ahorro de dinero para el país. Si hubiéramos tenido que acudir al mercado internacional para comprar esos elementos de patrullaje y de combate, habríamos tenido que gastar más del doble del dinero, y no habríamos ganado la acumulación de experiencia que se ha venido ganando en Cotecmar.
Y esto es motivo de admiración no solamente doméstica sino internacional. En el mundo se respeta a la Armada de Colombia.

Nuestra patria tiene 16 mil kilómetros, aproximadamente, de ríos navegables. Cuando empezó nuestro Gobierno, la Armada apenas podría patrullar unos 3 mil kilómetros. Hoy está patrullando más de 14 mil kilómetros. Y eso tiene que ser patrullaje para derrotar el narcotráfico y el narcoterrorismo. Y tiene que ser la preparación para que todas las comunidades ribereñas de los ríos de la patria puedan recibir apoyos sociales.

Visión de futuro para la Armada

Soñamos en que el fortalecimiento y el crecimiento de la Armada, en el momento en que empiece ya a desaparecer totalmente el terrorismo, se pueda transformar en asistencia a los agricultores, a los pescadores. En asistencia en medicina a todas las comunidades, en trabajo con las comunidades, en promoción de la enseñanza, en integración educativa con todas las comunidades que viven a lo largo de nuestros ríos.

Muy apreciado General Freddy Padilla de León, Comandante General de las Fuerzas Militares y Ministro encargado de la Defensa; muy apreciado Almirante Guillermo Barrera (Comandante de la Armada Nacional): creo que en el salto estratégico, tan cuidadosamente diseñado por ustedes y el ex ministro Juan Manuel Santos, y que es un paso fundamental en el desarrollo de la política de la Seguridad Democrática, debemos agregar un capítulo: la visión de futuro de nuestras fuerzas.

Cotecmar, la Armada, tienen que constituirse en la gran escuela de marina y de infantería del continente. Y ya han venido dando pasos. La graduación, que nos enorgullece y que lo hacemos con solidaridad y con patriotismo, de nuestros hermanos hondureños, en esta ceremonia de hoy, indica el respeto con que se mira desde los países hermanos a nuestra Armada.

Necesitamos incorporar en el salto estratégico ese capítulo: la visión de la Armada del futuro. Como tenemos que hacerlo con la Fuerza Aérea, tenemos que hacerlo con la Policía, tenemos que hacerlo con el Ejército.

Me preguntan muchos en el continente: Colombia ha crecido bastante sus fuerzas para enfrentar el terrorismo. ¿Qué va a hacer con esas fuerzas en el momento en que ya ceda definitivamente el terrorismo? Mi respuesta ha sido: Esas fuerzas, orgullo de Colombia, tienen que ir evolucionando diariamente a lo que se llama ‘los usos civiles y sociales’.

En el campo de la Armada: el liderazgo en la preservación de los ríos, de los mares. En el apoyo a todo el campesinado de pescadores, a los pescadores de nuestros mares y de nuestros ríos. El apoyo a la informática de esas comunidades. Tiene que ser la Armada una fuerza ambulante de enseñanza, de asistencia médica. Tiene que ser la gran escuela de marina y de infantería del continente. Y tiene que ser la gran fábrica de construcción de naves, y el gran taller de reparación de naves, siempre incorporando tecnología de punta.

Yo le ruego, general Padilla, Comandante General y Ministro encargado, y señor Almirante Guillermo Barrera, que trabajemos en esos anexos al salto estratégico, para que los jóvenes vean que hay una visión de largo plazo de nuestras fuerzas. Que no vamos en esa visión solamente hasta la derrota contundente del terrorismo, sino que la queremos visionar desde ya, para que las nuevas generaciones las sigan viendo con toda la esperanza.

Nos sentimos muy orgullosos de ver cómo nuestros jóvenes se interesan por ingresar a las escuelas de las diferentes fuerzas. Nos sentimos muy orgullosos de la formación que aquí se da, desde la disciplina que se forja, de las buenas costumbres, del compromiso con la patria. Y nos sentimos muy orgullosos de esta nueva generación.

La Seguridad Democrática ha ayudado a enfrentar la crisis

Colombia vive un momento muy difícil de la economía, como lo vive la comunidad internacional. Tenemos, en medio de las dificultades, circunstancias que nos han permitido en alguna forma enfrentar esta crisis.

En los últimos días hemos podido adjudicar licitaciones de gran significado para carreteras. Un programa de 1.600 kilómetros. Antes de que concluya el año, habremos adjudicado la Ruta del Sol, la gran carretera Bogotá – Santa Marta. Y ya se abrió la licitación para fusionar todas las concesiones del Caribe en una sola concesión, que se encargue de la gran carretera entre Palo de Letras, en la frontera con Panamá, y Paraguachón, en la frontera con Venezuela.

Hemos procurado hacer seguimiento, fiscalización diaria, para cumplir con los cronogramas.

Y esto ha sido posible, en medio de la crisis de la economía, porque el país ha mejorado. ¿Y por qué ha mejorado el país? Ha mejorado el país por muchas circunstancias: que el buen manejo de la economía, que la política de incentivos, etcétera. Pero fundamentalmente ha mejorado por la política de Seguridad Democrática.

Y la política de Seguridad Democrática no ha sido un don gracioso, ha sido el producto del sacrificio de nuestros compatriotas de las diferentes fuerzas.

Duele cuando se sabe que combatiendo en la Operación Omega contra el terrorismo, son asesinados seis soldados de la patria. Duele cuando al inicio de esta ceremonia, escuchamos mencionar los nombres y recordar a aquellos integrantes de la Armada víctimas de los violentos en el último año.

Rendimos honor a todos ellos, porque ellos han logrado la hazaña de que este país, que parecía condenado a que sus instituciones desaparecieran en poder del terrorismo, se haya venido recuperando.

Que no nos quepa la menor duda: el heroísmo de los integrantes de nuestras Fuerzas Militares, de la Armada, del Ejército, de la Fuerza Aérea, el heroísmo de nuestros policías, ha configurado en la Nación entera un respiro de seguridad con valores democráticos, que le ha creado condiciones al país para poder enfrentar estos difíciles momentos de la economía.

Tenemos un desempleo muy alto. ¿Qué sería, si no fuera porque gracias a la Seguridad Democrática el país lo ha rebajado en 6 – 8 puntos? ¿Qué sería de haber seguido con esa violencia y haber tenido como agravante la crisis que hoy enfrentamos en la economía?

Hemos ganado bastante a pesar de todo lo que falta.

Recuerdo estas llanuras del Caribe. Por ejemplo, en Sucre, el Golfo de Morrosquillo estaba en poder del narcotráfico y de los mal llamados paramilitares. Y mirando después las colinas de los Montes de María hacia las sabanas y hacia el sur, del narcotráfico y del grupo del narcoterrorista de las Farc y del Eln.

Hemos avanzado bastante a pesar de lo que falta.

Hoy se ha recuperado el monopolio para el Estado de combatir a los criminales. La palabra ‘paramilitar’ surgió para denominar a bandas privadas criminales cuyo propósito era combatir a la guerrilla. Ese monopolio que perdió el Estado, se ha recuperado.

Recuerdo en todos los actos públicos a mis compatriotas, cómo nuestra justicia había sido desplazada y derogada. En muchos sitios, aquí cerca en los alrededores de Cartagena, en muchas partes ya la justicia no la ejercían los jueces ni los fiscales. Eran los cabecillas de la guerrilla terrorista, del paramilitarismo terrorista, los que ejercían como jueces y fiscales. Habían suplantado, desplazado a la justicia.

La justicia ha recuperado totalmente ese monopolio.

Reparación a las víctimas

Asistimos en Medellín, durante el fin de semana anterior, al Congreso internacional de Víctimas (del Terrorismo), que se abrió en presencia de sus Altezas, los Príncipes de Asturias, y lo clausuró el Presidente (Felipe) Calderón de México.

Pues bien, el país empieza a ser distinguido en la comunidad internacional por su compromiso para reparar a las víctimas, su compromiso en las leyes y su compromiso en la práctica.

En este mes de junio, apreciados compatriotas, el Ministerio del Interior, en compañía de los altos comandantes, empezará a reparar víctimas. En medio de la crisis económica, desembolsaremos aproximadamente 100 millones de dólares, para empezar la reparación en el componente pecuniario, de 10 (mil), 12 mil víctimas. Son más de 200 mil las inscritas.

Me decían: ‘Bueno, Presidente, pero qué raro, un Gobierno como el que usted preside de mano dura, tan cuestionado por algunos críticos, y cómo asume este liderazgo en la reparación de las víctimas’.

La respuesta es sencilla: para tranquilidad de estos jóvenes que empuñan las armas de la República, los graduandos de hoy, para la conciencia también tranquila de sus papás y de sus mamás, esta seguridad la hemos desarrollado con valores democráticos, con respeto a las libertades, con respeto a los derechos humanos, con total consideración por las víctimas.

Las víctimas en el pasado no reclamaban porque temían reclamar o porque lo encontraban inútil. Hoy los colombianos reclaman sus derechos y los colombianos denuncian cuando son víctimas de abusos. Creo que ahí se presenta un gran avance que dice: por qué nosotros diariamente calificamos como democrática a esta iniciativa de seguridad de Colombia.

Las Fuerzas Militares y de Policía se sentirán honradas en este junio, cuando asistan al evento de que como componente de la Seguridad Democrática el país empieza la reparación pecuniaria de las víctimas.

Vamos a seguir trabajando.

Nuevo Atlas

Al medio día lanzamos en Bogotá la última edición del Atlas de Colombia. Asistieron muchísimos niños, hijos de los funcionarios del Agustín Codazzi y de nuestros compañeros de la Presidencia.

Les preguntaban: ‘Bueno, en este Atlas de Colombia identifiquen cuál es el punto más al norte del país’. Un niño decía: ‘Ya lo sé, Punta Gallinas, en La Guajira’. Díganos cuál es el municipio más extenso de Colombia. El otro niño decía: ‘Cumaribo’.

Y yo, el Presidente de Colombia, el presidente circunstancial, se equivocó diciéndoles: ‘Cumaribo (Vaupés)’, cuando es Cumaribo (Vichada).

Un municipio tan enorme, que en el mapa la cabecera municipal parece más cerca de Villavicencio que de Puerto Carreño, y es un municipio que va prácticamente desde el occidente del Vichada, siguiendo el río Vichada, hasta el río Orinoco.

Y esos niños mostraban un gran conocimiento por la geografía de la patria. Sentíamos que esos niños se estaban enraizando más y más en la patria.

Y eso me hacía pensar que no ha sido estéril el esfuerzo, el sacrifico de los soldados y de los policías, de los infantes, de los soldados de la Fuerza Aérea. Hoy hay más sentido de patria, más adhesión a la patria. Hoy hay más compenetración, más raíces patrióticas. Lo advertíamos esta tarde en esa nueva generación de colombianos.

Confiamos, señor Almirante Barrera (Comandante de la Armada Nacional) y señor Contraalmirante Ordóñez, Director de esta Escuela Naval, que próximamente todas las entidades de educación con conectividad a Internet, puedan acceder plenamente a ver de manera activa el mapa de Colombia, en esta nueva versión del Instituto Geográfico Agustín Codazzi.

Y que ojalá ustedes les enseñen a todos los niños la magnitud de los ríos de este país. Pediré a la Armada que entre, con el Agustín Codazzi, a hacer una parte bastante dinámica de Internet en la explicación de esos mapas, para que todos los niños puedan ver la longitud de los ríos de Colombia, el número de ríos.

Esa circunstancia, para muchos desconocida, que esta patria tiene 16 mil kilómetros de ríos navegables, que en esta patria esos ríos vivían abandonados a la suerte, a lo que dispusieran los terroristas, que hoy un 87 – 90 por ciento de esa extensión navegable está controlada por la Armada.

El heroísmo de todos aquellos que se han sacrificado por la seguridad tiene que expresarse en el afecto de las nuevas generaciones por la patria, como lo advertimos esta tarde, al entregar el nuevo mapa de Colombia, la nueva versión del Agustín Codazzi.

Bicentenario

El 20 de julio, en Tame, Arauca, habrá un paso excepcional para la conmemoración del Bicentenario de la Independencia. Nuestras Fuerzas Militares y de Policía ese día iniciarán la representación del recorrido del Ejército Libertador.

Se dirigirán de Tame, escala por escala, en el pie de la montaña, en el fin de la llanura, para remontar la Cordillera Oriental, cruzando el Páramo de Pisba, bajando a las llanuras del Pantano de Vargas y el Puente de Boyacá, y su llegada la recibiremos el 7 de Agosto en el Puente de Boyacá.

Nuestros soldados y policías deberán ser acompañados por la televisión del Estado, por unos textos patrióticos y objetivos que acompañen esas escenas. Y diariamente la televisión del Estado debe mostrar un capítulo de esa gesta libertadora a toda la audiencia de Colombia, a toda la teleaudiencia, empezando por los estudiantes.

Creemos que lo mejor para el futuro del país es infundir valor – patria. Cuando se siente la patria, se adquiere el compromiso de proceder con honradez. Cuando se ama a la patria, se vence la pereza. Cuando se ama a la patria, hay más devoción por el colectivo. Cuando se ama a la patria, cada ciudadano se siente más integrado a la comunidad.

Infundamos amor por Colombia. El amor por Colombia que percibimos hoy en este grupo de graduandos de excelencia.

Gran Concierto Nacional

El 20 de julio, en todas las localidades de Colombia, y Cartagena, con la señora Alcaldesa (Judith Pinedo) ejerciendo liderazgo, será un ejemplo, debemos tener un concierto, que convoque a todos nuestros artistas y a todas nuestras comunidades.

Que la alegría de la música diversa de la patria se oiga en todos los confines el 20 de julio, para que el 20 de julio no se reduzca a una gris lamentación o remembranza de patria, sino a una confirmación profunda del amor a Colombia.

Quiero invitarlos a todos a estos eventos. Y sé que trabajando devotamente por Colombia, con un amor a la patria, confirmado al amanecer de cada día, esta patria saldrá adelante. Superará la pobreza, construirá equidad.

Política social

Da gusto saber que Cartagena, en medio de las dificultades de la pobreza de muchos de sus habitantes, se va aproximando a 50 mil Familias en Acción. Las Familias más pobres que reciben ese subsidio del Estado para garantizar la educación se sus hijos, para que sus hijos no estén condenados a ser pobres por la pobreza de sus padres, para que a través de la educación esa nueva generación pueda ascender en las escalas de la democracia.

Ayer la señora Secretaria de Estado de los Estados Unidos, la señora Hillary Clinton, se asombraba al saber que Colombia, de los 46 millones de habitantes, tiene 41 millones con seguro de salud.

Yo le decía: ‘Pero todavía nos falta. Nos faltan unos cinco millones por asegurar’. Y todavía con muchos de los asegurados hay problemas. Porque hay dificultades en hospitales, porque hay dificultades de calidad. Pero el país está avanzando, no solamente para que todos los ciudadanos tengan seguro de salud, sino para que tengan muy buena calidad en la atención.

Todo esto está vinculado al heroísmo de las Fuerzas Militares y de Policía. Sin ese heroísmo, el país no habría podido avanzar en la obtención de los recursos para la educación, para la salud.

Confío que en este proceso integral el país pueda tener satisfacciones, como la entrega, ya no muy lejana, del macroproyecto de Cartagena, en el cual trabajan intensamente la Alcaldía, la Fundación Mario Santo Domingo y el Gobierno Nacional, para que esta ciudad le muestre al mundo que no solamente quiere ser la capital mundial del turismo, sino también una de las capitales mundiales de la equidad social, en la medida en que podamos sustituir los cordones tuguriales por vivienda digna para todos los ciudadanos de Cartagena.

Felicitaciones a la nueva promoción

Felicito a esta gran promoción. Al subteniente de Infantería de Marina Fabián Fernando Quimbayo Cayón, distinguido hoy con la Medalla ‘Francisco José de Caldas’, como el sobresaliente integrante de su promoción.

A las mamás y a los papás de nuestros graduandos, toda la felicitación, la gratitud.

Cuando estrecho la mano al papá de un subteniente de la Armada en esta Ceremonia, o saludo con afecto a la mamá de ese subteniente, por allá algo se mueve en la conciencia.

Los papás y las mamás de las nuevas generaciones de colombianos tenemos toda la gratitud con los papás y las mamás de aquellos jóvenes que, con su valor civil, que en la Armada, que en la Fuerza Aérea, que en el Ejército, que en la Policía, que en todas las Fuerzas, con su sacrificio nos han venido dando la seguridad.

Papás y mamás: un aplauso muy grande a ustedes, porque lo mejor de Colombia lo han entregado para lo mejor de Colombia, que es la patria, que debe darles felicidad a las nuevas generaciones.

Muchas gracias. Y que nuestra Armada avance. Hoy se refuerza con esta pléyade de jóvenes de las mejores condiciones ciudadanas. Felicitaciones, subtenientes”.

 

Palabras del Presidente Álvaro Uribe durante ceremonia de ascensos de la Armada Nacional

Cartagena, 3 dic (SP). “Este es un día de esperanza para Colombia, después de haber hecho una graduación de un grupo numerosísimo y calificado de la Policía Nacional. A primera hora de hoy ascendió a Mayor General el Director de la Policía, General Óscar Naranjo Trujillo.

Después, en la Escuela José María Córdova, 426 jóvenes fueron graduados como subtenientes del Ejército de la patria. Allí ascendió a General pleno el General Óscar González, Comandante del Ejército. Caía ya la media tarde, y en la Escuela ‘Marco Fidel Suárez’ de la Fuerza Aérea, en Cali, 200 compatriotas ascendieron a subtendientes de la Fuerza Aérea. Veinte de ellos, mujeres. Y ascendió a Mayor General el Director de la Escuela ‘Marco Fidel Suárez’, el señor General Javier Pérez Mejía.

Y da gusto para la patria, esperanza en el futuro de la patria, acudir esta noche a este campo de parada, para constatar el ascenso a Vicealmirante del hasta hoy contralmirante Daniel Iriarte Alvira.

¿Saben ustedes cómo lo reconocen sus compañeros de la Armada? Un ejemplo de rectitud, un ejemplo de ecuanimidad, quien tiene a su cargo uno de los proyectos más importantes de la patria: la dirección de Cotecmar, donde se viene todos los días perfeccionando el proceso de construir las naves para cubrir nuestros océanos y nuestros ríos.

Y es emocionante esta graduación de jóvenes: 100 jóvenes colombianos –veinte de ellos mujeres y un joven panameño, quien ha confiado en nuestras instituciones–, se gradúan hoy como subtenientes y como tenientes de corbeta.

Muchas gracias a todos ellos. Muchas gracias a los graduandos de la Armada, a los graduandos del Ejército, a los graduandos de la Fuerza Aérea, a los graduandos de la Policía Nacional.

Comentaba hoy con el señor Ministro y con los Altos Mandos que es difícil que un país del continente esté graduando con esta cantidad, con esta calidad, con este profesionalismo. Es un gran motivo de esperanza para la patria.

Todos estos muchachos pudieron haber tomado la decisión de haber entrado a la universidad, a institutos tecnológicos, a carreras técnicas. Llevar una vida más tranquila, dedicar algunos fines de semana a la rumba. Sin embargo, ellos tomaron una decisión de abnegación, de sacrificio, de disciplina, de patriotismo: la de abrazar las armas de la República.

Ese patriotismo de ustedes, apreciados jóvenes, en ustedes implica sacrificio. A sus familias les traerá honor y a sus conciudadanos les traerá paz, tranquilidad.

Los niños y los que han de venir, todos aquellos que van formando el discurrir de la patria, podrán vivir más tranquilos por el esfuerzo de ustedes, apreciados jóvenes.

Vivimos en una patria con grandes posibilidades y dificultades. Tenemos la dificultad de las ‘pirámides’, tenemos la dificultad de las inundaciones, las dificultades de la economía mundial y los grandes retos, todavía vigentes, de la Política de la Seguridad Democrática.

‘Pirámides’

Estamos haciendo un gran esfuerzo para que en aquellos departamentos afectados por las ‘pirámides’, rápidamente crezcamos los programas sociales: que Familias en Acción, que Familias Guardabosques, que irriguemos créditos para que la gente pueda encontrar un medio de trabajo lícito que les permita superar lo que perdieron en las ‘pirámides’.

Hemos pedido a los colombianos que se reflexione, que apostarle al dinero fácil, que invertir en lo ilegal, nunca trae algo bueno.

Muchos colombianos han perdido allí esfuerzos de muchos años. Y los perdieron por permitir que la criminalidad los sedujera. Por permitir que aquellos criminales hicieran gala de su cultura y de sus costumbres mafiosas, para dilapidar los ahorros de muchos colombianos.

Roban aquí, se radican en otros países, viven allí como sibaritas. Los colombianos nos aterramos cuando vimos que estaban gastando el dinero en carros Maserati y de otras marcas, que muchos colombianos, me incluyo entre ellos, nunca habíamos oído mencionar. No se puede caer en esas trampas, apreciados compatriotas.

El Gobierno va a ayudar con políticas sociales, con irrigación de crédito. Al mediodía firmamos nuevos decretos extraordinarios para avanzar en ese proceso. Pero lo que no podemos es que con recursos del Estado se devuelva lo que muchos ciudadanos perdieron.

Estamos haciendo todo el esfuerzo, con la Policía, el DAS y las autoridades internacionales, para hallar los lugares donde escondieron esos dineros estos criminales, a ver cómo esos dineros regresan a Colombia y se pueden utilizar para devolverlos a los ciudadanos que los perdieron.

Haremos todos esos esfuerzos. Pero no podemos acceder a la petición de obtener dineros del Estado para recuperar lo que muchos ciudadanos perdieron.

Lo lícito siempre prospera. Lo ilícito no se puede premiar. Crearíamos un pésimo precedente. Alguien me llama y me dice: ‘Presidente, sálgase de ese problema. Se le va a afectar el apoyo de los colombianos. Acepte devolver ese dinero. Eso le da tranquilidad’.

Y he hecho esta reflexión, apreciados compatriotas: es preferible la intranquilidad del gobernante, que la intranquilidad futura del país. Si hoy, por la tranquilidad del gobernante, incurrimos en el grave precedente de premiar lo ilícito, devolviendo esos dineros, se desarrollará una cultura de permisividad con la ilicitud, que le traería inmensa intranquilidad futura al país.

Asumimos con toda responsabilidad las dificultades del momento, y queremos manejarlas y superarlas cuidando fundamentalmente la cultura de legalidad, que debe enseñorearse de la Colombia de las nuevas generaciones.

Inundaciones

Muy afectado está el país por las inundaciones. Toda la ribera del Magdalena, del Cauca, La Mojana, municipios de Bolívar, del Magdalena, de Atlántico, de Córdoba, Gamarra, La Gloria, Tamalameque en el Cesar, Puerto Wilches en Santander, los municipios del Atrato.

La Armada está haciendo un gran esfuerzo para ayudarnos a salir adelante. Los integrantes del Gobierno quisiéramos estar en todas partes. Allí donde un colombiano tenga un dolor de cabeza.

No acudimos a más sitios porque la agenda no nos lo permite. Porque carecemos del don de la ubicuidad. Pero todos los compatriotas afectados por estas inundaciones pueden saber que no están solos.

Estamos dotando a los departamentos afectados de bancos de materiales para que, con el apoyo técnico de la Armada, del Sena, de los ingenieros del Ejército, las personas que han perdido sus casitas por estas inundaciones las puedan reconstruir.

Hemos ordenado a los concesionarios de vías del Estado, trasladar la maquinaria hacia las carreteras secundarias y terciarias que han sido afectadas por la ola invernal. Encontraremos un mecanismo transparente para pagar esos servicios, a fin de poder reconstruir la red vial, seriamente deteriorada.

Continuaremos en todos los esfuerzos para poder superar esta emergencia.

Efectos del heroísmo de la Fuerza Pública

Y por supuesto, enfrentamos las dificultades de la economía mundial. Nos ayuda que Colombia es un país con confianza inversionista.

Ayer se instalaron aquí, en Cotecmar –Corporación de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo de la Industria Naval, Marítima y Fluvial–, unos equipos portuarios que era difícil anticipar hace seis años. Qué bueno.

Gracias a que en Colombia hay condiciones para invertir. Condiciones que han surgido que del manejo macroeconómico, condiciones que han surgido que de los estímulos tributarios. Cotecmar, por ejemplo, recibe para estos equipos tratamiento de zona franca.

Pero fundamentalmente, ¿saben ustedes de dónde han surgido esas condiciones? Del heroísmo de los integrantes de la Armada Nacional, del heroísmo de los soldados, del heroísmo de los integrantes de la Fuerza Aérea, del heroísmo de los policías de Colombia, que, al avanzar en la derrota de los criminales, ha devuelto condiciones para que el país salga adelante.

Hay que conectar siempre la seguridad con lo social. Un día llegaba yo, con el Almirante Guillermo Barrera Hurtado, Comandante de la Armada Nacional, a San Jacinto, cuando en los desesperos para enfrentar a los criminales, al principio de Gobierno, él trasladó su puesto de mando a El Carmen (Bolívar), y cuando hablábamos con los ciudadanos de San Jacinto, Bolívar, me decían: ‘Presidente, gracias por habernos devuelto el almacén’.

Yo preguntaba: ‘¿Cómo así?’. Y dijeron: ‘Sí, es que nuestro almacén es la carretera. Aquí tenemos la venta de hamacas, de artesanías. Y eso se había cerrado porque por aquí nadie había vuelto a pasar. La Seguridad Democrática empieza a recuperarnos el almacén’.

Ese es el efecto del heroísmo de los integrantes de las Fuerzas Armadas de Colombia, del heroísmo de ustedes, apreciados jóvenes graduandos. Y eso ayuda a enfrentar estas dificultades de la economía.

Que las enfrentaremos con más política social, avanzando en todo el programa de infraestructura. Celebro que ya exista consenso de la ingeniería sobre una de las obras de mayor reto en Colombia: la obra para que se puedan controlar los sedimentos del Canal del Dique y evitar que sigan matando la Bahía de Cartagena.

Reactivación del turismo

Y miren cómo se conecta la política social con la política de seguridad, a partir de ese pequeño ejemplo del diálogo con un artesano en San Jacinto.

En Cartagena se había desterrado el turismo. El lunes empiezan a salir desde Cartagena turistas que pueden embarcar, por primera vez, en los barcos de los cruceros del Caribe. Qué gran avance para Colombia.

Es posible que en el próximo año, desembarquen en Cartagena 300 mil turistas de los cruceros del Caribe. No habíamos soñado que una firma transnacional de cruceros tomara la decisión de permitir el embarque de pasajeros en Colombia. Eso se debe al avance de la Seguridad Democrática.

Y todo pasajero, todo turista que se desembarca, es una oportunidad para el taxista, una oportunidad para la joyería, una oportunidad para los restaurantes.

Dos días antes de iniciar nuestro Gobierno, la Gobernación de Bolívar fue semidestruida con una bomba. Pues bien, ahora en lugar de que esas bombas nos estén afectando a diario, Cartagena avanza con unas obras de gran importancia.

Relación entre la política social y la política de seguridad

Ya Cartagena tiene cerca de 50 mil Familias en Acción. Hemos reducido el homicidio, pero las Familias en Acción han pasado de 220 mil a 1 millón 700 mil. Y el año entrante, con la ayuda de Dios, serán 3 millones de Familias en Acción. Los más pobres recibiendo un subsidio del Estado para garantizar la educación de sus hijos.

A medida que hay más seguridad, hay más posibilidades de política social.

No solamente celebro la circunstancia de la graduación de estas escuelas. Hace dos noches, con la señora Ministra de Educación, Cecilia María Vélez, entregábamos los diplomas a los mejores de la educación colombiana: al mejor Icfes, al mejor profesor, a los mejores egresados de cada programa, a las mejores universidades.

Y traigo una felicitación. Me explico: el Ministerio de Educación tiene dos certificaciones. Una certificación, que es la básica, para todo programa universitario. Y otra que es la certificación de calidad, la certificación de excelencia.

Hace dos noches, dos universidades colombianas recibieron la certificación de excelencia: la Universidad de La Salle y la Escuela de Suboficiales de la Armada Nacional de Barranquilla. Yo sentí un gran orgullo.

Cuando el país estaba arruinado por la violencia, teníamos 980 mil estudiantes universitarios. Hoy tenemos casi millón y medio.

En las ruinas de la violencia que avanzaba, teníamos 1 millón 100 mil estudiantes al año en el Sena. Hoy 6 millones de estudiantes.

Por favor, apreciados compatriotas, establezcamos siempre esa necesaria relación entre la política de seguridad y la política social.

La labor de la Armada Nacional

Quiero invitarlos a que sigamos en esta magnifica tarea. Es grato visitar la Armada Nacional, ir a Cotecmar y ver que embarcaciones que habría que comprar a precios mucho más altos en el extranjero, se están fabricando allí, bajo la conducción del Vicealmirante Daniel Iriarte Alvira.

Es grato presenciar que otro día le entregan a la Armada Nacional el certificado de calidad de Icontec. Es grato asistir a la entrega del certificado de institución universitaria de excelencia a la Escuela de Suboficiales. Y es grato constatar el avance en los ríos de Colombia.

Colombia es uno de los primeros países del mundo en cantidad de agua dulce como proporción al territorio. La cantidad de nuestros ríos, las extensiones navegables, los caudales, nos convierten en uno de los cuatro países del mundo, proporcionalmente, más ricos en agua dulce.
El terrorismo pensaba que los ríos eran de ellos. Si controlaban parte del Magdalena y controlaban todo el Bajo Cauca, el Cauca navegable, y controlaban el Atrato, ¿se imaginan ustedes cómo el terrorismo controlaba el Putumayo, nuestra fracción del Amazonas, el Guaviare y el Meta?

Pero ellos se equivocaron. Ellos pensaron que la Armada Nacional se iba a quedar toda la vida en la Bahía de Cartagena, dando la noticia de la partida del Buque Gloria y dando la noticia de la llegada del Buque Gloria.

Ignoraba el terrorismo que la fuerza del pueblo colombiano nos conduciría a un gran fortalecimiento de la Armada Nacional, dirigido por su ex alumno, el Ministro Juan Manuel Santos, para que la Armada pueda cubrir todos los ríos de Colombia.

Hoy la gloria de la Armada Nacional no radica exclusivamente en nuestra fragata insignia. La gloria de la Armada radica en que sus infantes, sus embarcaciones, están en el Amazonas, en el Guaviare, en el Meta, en el Ariari, en el Guayabero, en el Guajear.

Y allí, los que se sentían dueños y señores, los amos del terrorismo, están hoy en estampida, gracias a la esa gran contribución de la Armada Nacional en los ríos de la patria. Contribución a la lucha heroica de nuestro Ejército.

Muchas gracias, queridas familias. Ustedes han aportado a la patria lo mejor: los hijos. Ustedes tienen un momento de felicidad, queridas familias: la graduación de esta noche. Pero tienen muchas horas de angustia: estos jóvenes parten en los próximos días a los ríos de Colombia. Parten a enfrentar a los criminales. Y todos los días hay un Padrenuestro, un Avemaría, una oración en la casa, y en todos los minutos angustia y preocupación.

Muchas gracias, queridas familias, porque ese sacrificio de ustedes lo tenemos que agradecer todos los demás, que son mamás o que somos papás en Colombia.

La exposición al riesgo de sus hijos es motivo de intranquilidad para ustedes, de honor de patria para ustedes, y de tranquilidad para el resto de las familias de Colombia.

Apreciados graduandos: miren a su Comandante, el Almirante Guillermo Enrique Barrera Hurtado, Comandante de la Armada Nacional. Miren a su Comandante, el Almirante David René Moreno Moreno. Sobre sus hombros están las insignias: las tres estrellas de mar. Piensen ustedes que allí hay una carrera de 40 – 41 años de servicio a la patria. Háganla ustedes. Que cuando sobre sus hombros estén las tres estrellas de mar, reconociendo su gran tránsito por la Armada, haya una Colombia a la que le haya sido posible en muchos años disfrutar las mieles de la seguridad.

Tengan una Armada con una paz consolidada y una Armada con el mayor reconocimiento científico.

Por ahora, la seguridad de todos los colombianos, el avance de Cotecmar, las nuevas dotaciones para que en adelante la Armada de Colombia esté siempre presente en los grandes desarrollos científicos del planeta. Ustedes lo van a lograr, apreciados jóvenes.
El Ministro Santos de Defensa, Juan Manuel Santos, ha traído la bellísima frase, que el señor Almirante Lemaitre le repetía esta noche a su nieto. Lo invito a algo relacionado con esa frase. Apreciados integrantes de la Armada: mantengamos la espada desenvainada hasta que Colombia logre totalmente la paz.

Muchas gracias”.